<p>Casi año y medio después la OPA lanzada de forma hostil por BBVA para adquirir Banco de Sabadell está<i> vista para sentenci</i>a. <a href=»https://www.elmundo.es/economia/empresas/2025/10/10/68e7cbf7e9cf4af5198b45a5.html»>Ayer finalizó el plazo de aceptación para que los accionistas que así lo desearan acudieran al canje</a> propuesto por la entidad que preside Carlos Torres; y con él, al menos sobre el papel, se ha puesto también punto y final al intercambio de acusaciones, declaraciones diarias de sus máximos responsables y campañas publicitarias donde cada banco ha echado el resto para tratar de convencer al accionista de Sabadell de que su propuesta es la mejor para sus intereses.</p>
La entidad vasca solo renunciará a la condición mínima del 50% si la CNMV acuerda el mismo precio que en la primera OPA. De lo contrario, BBVA entiende que con superar el 38% tendría el control efectivo de Sabadell para seguir comprando acciones en el mercado los tres próximos años
Casi año y medio después la OPA lanzada de forma hostil por BBVA para adquirir Banco de Sabadell está vista para sentencia. Ayer finalizó el plazo de aceptación para que los accionistas que así lo desearan acudieran al canje propuesto por la entidad que preside Carlos Torres; y con él, al menos sobre el papel, se ha puesto también punto y final al intercambio de acusaciones, declaraciones diarias de sus máximos responsables y campañas publicitarias donde cada banco ha echado el resto para tratar de convencer al accionista de Sabadell de que su propuesta es la mejor para sus intereses.
Hasta el último minuto BBVA ha buscado accionistas de Sabadell para sumar a la causa. Por ello decidió abrir hasta 68 oficinas, 24 de ellas en Cataluña, con horario ampliado hasta las 21 horas y una línea telefónica que mantuvo activa hasta las 23:59 horas. «Efectivamente, estamos viendo un incremento del número de accionistas que acuden a las oficinas en los últimos días. Si comparamos con procesos similares tanto en España como en el extranjero, el 75% de las aceptaciones vienen los tres últimos días y en esta línea se está registrando un aumento», comentaba ayer la entidad. La tournée mediática llevó ayer al presidente de Sabadell, Josep Oliu, a Catalunya Ràdio donde aconsejó a sus accionistas «tirar a la papelera» el documento que les ha enviado BBVA para sumarse a la OPA. «Los minoristas rechazan de forma masiva esta OPA, y si la rechazan los minoristas que nosotros tenemos, significa que la rechazan de forma masiva los clientes del Banco de Sabadell. Esto da una idea de cuál es la realidad de esta operación», aseveró el histórico banquero.
Carlos Torres pasó por los micrófonos de Radio Nacional de España a primera hora de la mañana donde, convencido de que superarán el 50%, quiso reforzar la idea de que BBVA no pagará un euro más de lo que ya ofrece por hacerse con Sabadell en el supuesto caso de que hubiera una segunda OPA. Este es el tejado donde está ahora la pelota en la operación. Para calmar la atención mediática y respirar unos días, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) salió al paso esta semana para confirmar que será el día 17 de octubre cuando dé a conocer los resultados de la OPA y que ese mismo día BBVA conocerá los criterios que utilizará para juzgar si un precio es o no equitativo. Debe hacerlo a propuesta de BBVA, que según parece no se moverá del canje actual que implica valorar a Sabadell sobre los 3,32 euros. Eso si, y solo si, se produce este escenario. Para ello la aceptación a la OPA debe situarse entre el 30% y el 50% de los derechos de voto del banco. En ese supuesto BBVA tiene la capacidad de decidir si renuncia al requisito autoimpuesto de una aceptación superior al 50% y rebaja el umbral al mencionado 30%. Lo hará, según apunta su presidente, si el precio a pagar es exactamente el mismo.
De lo contrario, la otra alternativa que se plantea BBVA es la de seguir comprando acciones de Sabadell a mercado. Tiene tiempo para hacerlo. En un reciente encuentro en los analistas de Barclays y Carlos Torres, según reflejan en un informe, el directivo se mostró convencido de poder controlar de facto Banco Sabadell si lograse alcanzar «un porcentaje del 36%-37%» cuando se liquide la OPA teniendo en cuenta el quórum histórico medio de las juntas de accionistas de Sabadell, que está en el 74%. A raíz de ahí, «BBVA cree que podría acumular [más acciones] comprando en el mercado» mientras avanzan los tres años impuestos por el consejo de ministros que obligan a mantener la independencia de cada marca.
La hipótesis que defiende BBVA es también la más optimista. La entidad ve fácil batir el 50% de aceptación. Cuenta, según dice, con el respaldo de todos los fondos institucionales activos, que atesoran el 30% del capital. Además, el consejero delegado de BBVA, Onur Genç, desveló esta misma semana que, en base a sus cálculos, los fondos pasivos acudirán con un 10% y decía tener el apoyo de algo menos del 0,8% de los minoritarios, ya que BBVA es depositario del 2% de las acciones de Sabadell. La antítesis de esta cuenta es la que realiza Sabadell. Su consejero delegado, César González-Bueno, sostiene que solo el 0,3% de los minoritarios que tienen acciones depositadas en el banco habría acudido al canje. Es una cifra relevante teniendo en cuenta que Sabadell es el custodio del 32% de las acciones de los minoritarios, sobre el 40% que suponen en total en el capital, y que son, además, clientes. Según el CEO de Sabadell, los fondos no tienen intención de acudir a la operación ante la falta de atractivo en el precio, a pesar de la mejora presentada por BBVA.
Los únicos accionistas que han desvelado cuál será su decisión son la aseguradora Zurich, con acuerdos con Sabadell para la comercialización de seguros, y un 5% del capital que ha anunciado que no suscribirá la oferta. El caso contrario es el de David Martínez, consejero también de Sabadell y fundador de Fintech Europe, que irá con su 3,86%. Ayer la agencia Bloomberg adelantó que los fondos activos de BlackRock, que es el primer accionista de Sabadell con el 7,2%, sí irán al canje, aunque ellos solo representan el 0,5% del total. El resto es gestión indexada.
La entidad vasca decidió responder a las exigencias del mercado al modificar su oferta una vez iniciado el periodo de aceptación. Lo hizo para ajustar la valoración de Sabadell a su precio en mercado, con un prima que se ha movido entre el 1% y el 3% las últimas sesiones. BBVA pasó de ofrecer un canje mixto de acciones y 0,7 euros en efectivo, a un intercambio integral en títulos del banco de nueva emisión. Entregará 1 acción a cambio de 4,8376 títulos de Sabadell. Si la aceptación resultase superior al 50% el accionista que haya acudido al canje podrá aplicarse el diferimiento fiscal y no tributar por las plusvalías generadas. En cualquiera de los otros dos escenarios deberá pasar por Hacienda, tanto si el respaldo queda entre el 30% y el 50% como si acudiera a una segunda OPA. Solo se librará de pagar si no vende sus acciones en ninguna de las ofertas o si la OPA fracasara porque BBVA no logre recabar un respaldo suficiente después de 17 meses de lucha.
Actualidad Económica