<p><strong>CriteriaCaixa</strong>, brazo financiero de la<strong> Fundación La Caixa</strong>, ha anunciado este lunes que prevé disponer de una capacidad de inversión de 8.000 millones de euros hasta 2030 y anticipa que pondrá disposición de la fundación más de 4.000 millones en ese periodo.</p>
Al cierre del pasado junio, el valor total bruto de los activos de Criteria había alcanzado 37.252 millones de euros
CriteriaCaixa, brazo financiero de la Fundación La Caixa, ha anunciado este lunes que prevé disponer de una capacidad de inversión de 8.000 millones de euros hasta 2030 y anticipa que pondrá disposición de la fundación más de 4.000 millones en ese periodo.
El holding de participadas adaptará su plan estratégico, que diseñó en 2024 con Ángel Simón todavía como consejero delegado, a la hoja de ruta de la obra social que se hizo pública el pasado junio.
Bajo esa premisa, la entidad que preside Isidro Fainé focalizará sus inversiones en proyectos centrados en la obtención de «rendimientos recurrentes, sostenibles y responsables», y promoverá en sus participadas la creación de valor con una visión a largo plazo, ha detallado en un comunicado.
«Esta hoja de ruta revisada mantiene el mismo norte que siempre hemos perseguido: dotar de dividendos y hacer crecer el patrimonio de la fundación», ha señalado Fainé en una nota que subraya los «programas sociales, de investigación y becas, y de cultura» que promueve la obra social.
Al cierre del pasado junio, el valor total bruto de los activos de Criteria había alcanzado 37.252 millones, ha informado hoy la entidad.
El primer semestre del año ha estado marcado por la evolución positiva del valor de las participadas y una sólida generación de caja impulsada por los dividendos recibidos, que ascienden a 1.074 millones.
Hasta junio, había distribuido un «dividendo social» de 360 millones a la fundación, a los que hay que añadir 125 millones adicionales aprobados por el patronato de la fundación el pasado 9 de octubre.
Criteria adelanta que mantendrá, en general, un perfil financiero «conservador» y niveles de deuda «moderados», con una deuda neta a medio plazo de cómo máximo el 10 % del valor total bruto de los activos.
Entre sus prioridades se encuentra asimismo mantener la calificación de «grado de inversión».
El director general de CriteriaCaixa, José María Méndez, ha destacado la «importancia del rigor y la independencia en la toma de decisiones, así como la excelencia en los procesos de análisis de inversión, la eficacia en la gestión y la eficiencia en resultados».
Con Francisco Reynés como vicepresidente, Criteria ha reorganizado la gestión en base a cuatro grandes carteras, la primera de las cuales denominan «participación fundacional», que mantendrá siempre una propiedad mínima del 30 % en CaixaBank.
La cartera de «inversiones relevantes» estará formada por «compañías competitivas, preferentemente cotizadas, que desarrollan sus actividades primordialmente en sectores clave de la economía, con perspectivas de futuro y visión industrial», ha señalado la entidad.
Naturgy, Telefónica, ACS y Veolia se cuentan entre las participaciones destacadas en esa cartera.
En esas empresas, Criteria aspira ser accionista de referencia y «ejercer influencia a través de su participación en sus órganos de gobierno».
El holding «fomentará y apoyará una estrategia de generación de valor en estas compañías, con visión y compromiso a largo plazo», y «promoverá la cooperación entre la acción social de las propias compañías y la desarrollada por la fundación», ha subrayado.
En el apartado de «inversiones alternativas», cuyo valor bruto no excederá el 10 % del total de los activos, estarán incluidos los activos inmobiliarios, cuyo objetivo es la generación de rentas recurrentes, con aspiración a una potencial revalorización.
También comprenden participaciones financieras en fondos de terceros, que invierten en compañías y proyectos no cotizados, «con vocación de crecimiento y con una previsión de liquidez más dilatada en el tiempo», así como inversiones directas o indirectas en empresas emergentes en campos como la tecnología y la biotecnología.
«La inversión en fondos de terceros permitirá a CriteriaCaixa ampliar el número de compañías en las que impacta, diversificar el riesgo y mantener de forma indirecta una involucración activa en la gestión», subraya la entidad.
Por último, la «cartera de liquidez» tiene la finalidad de mantener fondos disponibles para «atender las necesidades y compromisos contraídos a corto plazo», tanto por lo que se refiere a su operativa diaria como para las potenciales inversiones a acometer.
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