<p>Las rebajas de verano son, en teoría, una de las épocas más esperadas del año para los consumidores. Oficialmente comienzan el 1 de julio, pero en la práctica muchas grandes cadenas adelantan sus promociones varios días antes. Grupos como <strong>Inditex, El Corte Inglés, Mango o Tendam</strong> (propietaria de marcas como Springfield, Women’secret o Cortefiel) han convertido esta estrategia en una rutina comercial desde hace años, anticipándose a la fecha oficial para captar antes la atención del cliente. Sin embargo, lo que debería representar una oportunidad real de acceder a productos a precios reducidos, en muchos casos encubre<strong> una práctica desleal</strong> que perjudica directamente al bolsillo del consumidor. Según ha denunciado la<strong> Asociación de Usuarios Financieros</strong> (Asufín), numerosas tiendas y plataformas de comercio electrónico modifican los precios al alza en los días o semanas previos a las rebajas, para luego aplicar aparentes descuentos que en realidad no son tales. Este fenómeno consiste en elevar artificialmente el precio de los productos antes del periodo de descuentos, de forma que cuando llega la campaña de rebajas, el supuesto descuento se calcule sobre una base más alta. El resultado es una percepción engañosa: <strong>el cliente cree estar obteniendo un ahorro significativo</strong>, cuando en realidad está pagando prácticamente lo mismo que si hubiera comprado el artículo unas semanas antes.</p>
Zapatos, portátiles y frigoríficos se encarecieron entre cinco y nueve euros
Las rebajas de verano son, en teoría, una de las épocas más esperadas del año para los consumidores. Oficialmente comienzan el 1 de julio, pero en la práctica muchas grandes cadenas adelantan sus promociones varios días antes. Grupos como Inditex, El Corte Inglés, Mango o Tendam (propietaria de marcas como Springfield, Women’secret o Cortefiel) han convertido esta estrategia en una rutina comercial desde hace años, anticipándose a la fecha oficial para captar antes la atención del cliente. Sin embargo, lo que debería representar una oportunidad real de acceder a productos a precios reducidos, en muchos casos encubre una práctica desleal que perjudica directamente al bolsillo del consumidor. Según ha denunciado la Asociación de Usuarios Financieros (Asufín), numerosas tiendas y plataformas de comercio electrónico modifican los precios al alza en los días o semanas previos a las rebajas, para luego aplicar aparentes descuentos que en realidad no son tales. Este fenómeno consiste en elevar artificialmente el precio de los productos antes del periodo de descuentos, de forma que cuando llega la campaña de rebajas, el supuesto descuento se calcule sobre una base más alta. El resultado es una percepción engañosa: el cliente cree estar obteniendo un ahorro significativo, cuando en realidad está pagando prácticamente lo mismo que si hubiera comprado el artículo unas semanas antes.
Asufín ha analizado la evolución de precios en los tres meses previos a las rebajas oficiales, prestando especial atención a la tercera semana de junio, justo antes de que se activaran los primeros carteles de «-30 %» o «hasta el 50%». Su estudio revela que, productos de tecnología, moda y pequeño electrodoméstico subieron en torno a un 4% durante ese periodo. En concreto, el informe señala que productos como zapatos, frigoríficos y ordenadores portátiles llegaron a encarecerse entre 5 y 9 euros desde marzo hasta mediados de junio. Posteriormente, esos mismos artículos se ofrecieron con un supuesto descuento justo antes del 25 de junio, cuando algunas tiendas ya comenzaron sus campañas de rebajas. La trampa es que esa rebaja hacía parecer que el consumidor estaba ahorrando entre 10 y 20 euros, cuando en realidad el ahorro neto era muy inferior, o incluso nulo.
En este contexto, el Ministerio de Consumo anunció ayer sanciones contra siete empresas de comercio online por aplicar falsas rebajas durante la última campaña del Black Friday, con multas que podrían alcanzar los 350.000 euros.
Actualidad Económica