<p class=»ue-c-article__paragraph»>El informe se llama <i>Invertir en el Mediterráneo Dinámicas en Italia y España</i> y ve posible un buen futuro para ambos países si acometen un amplio número de recetas y corrigen su pobre comportamiento en los últimos quince años: «Al comparar la dinámica del crecimiento del PIB en Europa durante el período 2010-2024, queda claro que los resultados de ambos países siguen siendo modestos. España ocupa el puesto 20 entre los Estados miembros de la UE con solo 18,7 puntos acumulados, justo por debajo de la media de la UE, mientras que Italia ocupa el penúltimo lugar, con un crecimiento acumulado de solo 6,2 puntos en los últimos 15 años». Los primeros puestos de la UE, a amplia distancia, los ocupan Irlanda, Malta, Lituania, Polonia y Rumanía, todos ellos con más de 50 puntos porcentuales acumulados en el mismo período.</p>
El informe de Teha con la multinacional de EEUU y el exprimer ministro italiano cree en el futuro de ambos países mediterráneos si corrigen problemas crónicos serios.
El informe se llama Invertir en el Mediterráneo Dinámicas en Italia y España y ve posible un buen futuro para ambos países si acometen un amplio número de recetas y corrigen su pobre comportamiento en los últimos quince años: «Al comparar la dinámica del crecimiento del PIB en Europa durante el período 2010-2024, queda claro que los resultados de ambos países siguen siendo modestos. España ocupa el puesto 20 entre los Estados miembros de la UE con solo 18,7 puntos acumulados, justo por debajo de la media de la UE, mientras que Italia ocupa el penúltimo lugar, con un crecimiento acumulado de solo 6,2 puntos en los últimos 15 años». Los primeros puestos de la UE, a amplia distancia, los ocupan Irlanda, Malta, Lituania, Polonia y Rumanía, todos ellos con más de 50 puntos porcentuales acumulados en el mismo período.
El informe ha sido elaborado por la consultora de origen italiano The European House-Ambrosetti (Teha) con la colaboración de Amazon y la supervisión de un comité científico encabezado por el ex primer ministro italiano, Enrico Letta. El propio Letta presentará el documento en España el próximo mes, pero circuló ya en el Foro Ambrosetti el pasado fin de semana y ha tenido acceso a sus 90 páginas Actualidad Económica.
Letta cree que si ambos países colaboran e integran más sus economías pueden ser «la Escandinavia del Sur», pero el informe ve esencial corregir no pocas debilidades tanto por parte del Gobierno de Pedro Sánchez como por el de Giorgia Meloni y sus sucesores. Italia sigue avanzando en prima de riesgo mejorando esta semana a Francia y en mínimos con España, pero la foto de los últimos lustros es más favorable, al menos por ahora, a su vecino ibérico en importantes indicadores. Para empezar, España ha atraído desde 2015 más de 30o.000 millones de dólares de inversión exterior frente a los 191.000 que han ido para Italia. Da varios motivos. Por ejemplo, cómo será el sistema judicial italiano que el informe concluye que «es más rápido y eficiente el español»; y a qué nivel habrá llegado la estructura de impuestos italiana que «el sistema fiscal español es más simple y menos caro».
Otra ventaja española es su precio de la energía, pero el informe apunta dos debilidades importantes para el futuro. «Aunque la cesta energética de España está bien diversificada y, en general, funciona de manera fiable, el reciente apagón del 28 de abril de 2025, causado por una subida de tensión que la red no pudo absorber, pone de relieve la necesidad de que Red Eléctrica de España realice inversiones. El incidente demostró que los sistemas actuales de control y supervisión pueden ser insuficientes». La segunda es que España depende menos del gas que Italia, pero «esta ventaja podría verse parcialmente socavada por la eliminación gradual de la energía nuclear prevista por España para 2035, que actualmente ofrece una alternativa estable, baja en carbono y relativamente barata frente al gas natural».
Donde se impone Italia es en la regulación y unidad de mercado. «La fragmentación del sistema administrativo en España ralentiza las inversiones. El de Italia, aunque menos eficiente, ofrece un marco más uniforme y previsible». Y ambos tienen un problema común: «Los inversores necesitan saber que las normas que rigen sus operaciones no cambiarán de forma impredecible y que las protecciones legales para el capital, los contratos y la propiedad intelectual se aplican de forma estricta. El fortalecimiento de la seguridad jurídica y la confianza en las instituciones debería seguir siendo una prioridad máxima para ambos países».
Su conclusión es ésta: «Si Italia y España actúan con decisión en materia de reforma la Administración, infraestructura digital, claridad normativa, política de innovación y resiliencia demográfica, ambos países pueden mejorar considerablemente su capacidad para atraer inversiones de alta calidad. Estos esfuerzos, si se mantienen y coordinan, permitirán a Italia y España no solo cerrar la brecha de competitividad con el norte de Europa, sino también aprovechar fortalezas únicas para ser actores clave en una economía mundial en evolución». Se sabe lo que hay que hacer, pero gobernar con visión a largo plazo es otra cosa. El propio Letta, ex líder socialista, ha dejado la política y se siente más útil diagnosticando.
Actualidad Económica