<p><strong>Carles Puigdemont</strong> ha dado por buena la <a href=»https://www.elmundo.es/espana/2024/12/17/67615091fc6c839d6b8b45ad.html»>patada hacia adelante</a> que el PSOE y Sumar han propinado a la eventual tramitación de la iniciativa parlamentaria registrada para empujar a <strong>Pedro Sánchez</strong> a someterse a una cuestión de confianza.</p>
«Si no cambian mucho las cosas, no tiene sentido que sigamos dando apoyo al Gobierno de Sánchez», insiste el líder de Junts
Carles Puigdemont ha dado por buena la patada hacia adelante que el PSOE y Sumar han propinado a la eventual tramitación de la iniciativa parlamentaria registrada para empujar a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza.
El aplazamiento «deja todas las opciones abiertas», ha celebrado el líder de Junts, para después advertir al presidente del Gobierno que haber tumbado ya la tramitación «hubiera llevado la legislatura al colapso». «Saben las consecuencias irreversibles que hubiera tenido», ha añadido durante una entrevista concedida a TV3, para después considerar que «no podrán parar la tramitación» de la proposición no de ley. «Se tendrá que tramitar sí o sí», ha insistido.
«Es evidente que el PSOE no está cumpliendo. No puedo negar la evidencia. Si no cambian mucho las cosas, no tiene sentido que sigamos dando apoyo al Gobierno de Sánchez. Ahora no podemos ni negociar los Presupuestos», ha amenazado después el ex presidente de la Generalitat catalana.
Puigdemont ha reconocido, no obstante, que Sánchez «es capaz de aguantar toda la legislatura sin Presupuestos», aunque ha añadido: «Yo creo que un Gobierno no puede continuar así».
La advertencia llega una semana después de que el presidente de Junts lanzara su ultimátum a Sánchez y le reclamara un «punto de inflexión» para empezar a dar inmediato cumplimiento a los acuerdos recogidos en el pacto de investidura, entre los que destacan el reconocimiento de la oficialidad del catalán en Europa, la extinción del presunto «déficit fiscal» catalán o la aplicación a voluntad de la Ley de Amnistía para permitir su libre regreso a España.
Las relaciones con el PSOE no mejoraron a pesar de que el pasado viernes socialistas y neoconvergentes celebraron una nueva reunión en Suiza para tratar de limar asperezas tras su público desencuentro. El sábado, Puigdemont volvió a alertar al presidente del Gobierno de que no iba «de farol», a acusarlo de ser un «incumplidor permanente» e incluso llegó a solicitar a los cuadros de Junts «estar preparados» para cualquier escenario, hasta el de la ruptura definitiva con el PSOE.
Un día después, la vicepresidenta del partido nacionalista y portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, insistía en una entrevista concedida a EL MUNDO: «No va a haber estabilidad para el Gobierno si no cumplen el acuerdo. No estamos aquí para dar estabilidad a ningún Gobierno español».
Que TV3 haya decidido entrevistar a Puigdemont en horario de máxima audiencia ha generado una notable controversia en Cataluña. El líder de Junts renunció a ejercer como líder de la oposición, lo que hace difícilmente justificable que la televisión pública catalana haya reservado el prime time a la charla al no tratarse de un cargo institucional.
En la práctica, la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) -el ente que gestiona los medios públicos catalanes y que está dirigido por Rosa Gomà, designada por ERC antes de perder la Generalitat-, ha concedido al jefe de filas neoconvergente estatus informativo equiparable al otorgado al president Salvador Illa, que fue entrevistado en este mismo horario el 2 de septiembre. Lo ha hecho tras no pocas reclamaciones púbicas de Junts para lograrlo y desplazando a un equipo a Bruselas para evitar un encuentro telemático, dada la negativa de Puigdemont a regresar a Cataluña tras no ser amnistiado para no ser detenido.
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